Comprar bicicletas de segunda mano tiene ventajas e inconvenientes. No podemos saber el uso que se le ha dado a la bici, si está realmente en buen estado, como están las partes que no se ven (Como suspensiones o rodamientos…) Hoy quiero darte algunos consejos para que estés seguro a la hora de comprarte la tuya.
¿Las bicicletas de segunda mano tienen garantía?
La respuesta es no en el 90% de los casos. Normalmente la garantía va asociada al primer comprador, ya que las marcas hoy en día te “obligan” a registrar la bicicleta a tu nombre al comprarla. Incluyendo el ticket de compra que siempre irá asociado al primer comprador. Pero hay un truco, que puede funcionar o no.
Tienes que acordar con el primer dueño de la bicicleta, que en caso de que esta se rompa (Y esté dentro del periodo de garantía), sea el quien se encargue de ir a la tienda de bicis a tramitar la garantía, diciendo que la bici sigue siendo suya. Obviamente esto es ilegal, pero conozco a mucha gente que lo hace. Pero si la tienda o la marca descubren que es una bicicleta vendida a una segunda persona, podrían negarse a cubrir la garantía y estarían en todo su derecho.
Ve con un experto en bicicletas
Si es tu primera bici o no sabes mucho todavía de este mundillo, sería muy recomendable que fueras con un amigo que sepa de bicis, para que te ayude a detectar posibles defectos o desgastes. Mejor todavía sería que pudieras llevar a hacerle una revisión general a la bicicleta en un taller de bicis de tu elección. Ya que los expertos probablemente pueden detectar algunos fallos que puedan tener.
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Lo que no se ve también es importante
El funcionamiento de la bicicleta depende mucho de los rodamientos de la misma. Estos sufren mucho desgaste por el uso continuado, más si vives en una zona lluviosa en la que suele haber barro, porque este se mete en los rodamientos y es casi imposible de limpiar del todo. Pregúntale hace cuánto tiempo le hizo mantenimiento a los rodamientos, ya sea el pedalier, dirección y rodamientos de basculante. También son importantes los de los bujes de las llantas. Comprueba que todos estos ruedan con soltura y no notas “micro baches” como si alguna de las bolas estuviera rota. Lo ideal es que pruebes la bicicleta seca. Esto puede parecer una tontería, pero las bicis recién limpias, si las han mojado, suelen disimular estas pequeñas fricciones que vuelven a aparecer una vez secas.
Comprueba si notas algún juego o movimiento en la dirección y otros rodamientos. Esto puede ser por simple desajuste, o por estar en mal estado. Desde luego es una señal de alarma que, como mínimo, debería mirar un mecánico especialista antes de comprar. Esto suele ocurrir sobretodo en bicicletas baratas.
Las suspensiones, el alma de la bicicleta
Si te vas a comprar una buena bicicleta de segunda mano, probablemente tenga suspensiones. Estas, junto con los rodamientos, son las piezas que más mantenimiento requieren. Los fabricantes incluso recomiendan hacerles mantenimientos cada 50 horas de uso (Cosa que poca gente hace). Pregunta al menos cuándo fue el último mantenimiento. Comprueba si detectas alguna pérdida de aceite por los retenes. Si al accionar las suspensiones notas algún escalón o fricción. También debes comprobar si la bici tiene “juego” al accionar las suspensiones. (Cerciórate que este juego no provenga de las pastillas de freno, lo cual sería normal).
¿Cómo están las ruedas de la bici?
En este punto deberías mirar si las ruedas están centradas, tienen “bollos” en los aros o le faltan radios. Desde luego, tienes que notar que ruedan bien. Es normal que a veces estén ligeramente descentradas, por el uso. Un profesional podría llegar a centrártelas. Pero si es muy excesivo, quizás necesites un aro nuevo.
También puedes revisar el desgaste de los neumáticos, y valorar si están muy gastados el dinero que te vas a tener que gastar en unos nuevos.
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Los frenos de las bicicletas de segunda mano
Este punto tiene una parte bastante subjetiva. Ya que el tacto de las manetas nos puede parecer bueno o malo según nuestra costumbre. Comprueba que todos los reguladores/perillas funcionan bien. Al ser piezas tan pequeñas, se suelen atorar. Es un buen momento para ver si los discos tienen todos sus tornillos y están en buen estado (Centrados y no desgastados). Y ya por último, mirar si las pastillas están sin gastar.
En la zona de los frenos vamos a poder detectar el mimo con el que se trata la bici, al igual que la transmisión, son zonas que se ensucian fácilmente. Y es un buen lugar para darnos cuenta lo escrupuloso que es con la bici el antiguo dueño.
Ojo con la transmisión en las bicis de segunda mano
El plato, piñonera, cadena y cambios son partes de la bici que sufren muchísimo desgaste. Si el anterior dueño no ha limpiado y lubricado frecuentemente la transmisión de la bici, es muy probable que se haya desgastado prematuramente. Pregúntale cuántas cadenas a cambiado y cada cuantos kilómetros. Si las ha cambiado cada + de 1500km, probablemente haya empezado a gastar la piñonera y el plato de forma prematura. Y estas pueden llegar a ser piezas muy caras de cambiar en altas gamas. Y no hay nada peor que una bici con la transmisión mal, ya que pedalear se convierte en un sufrimiento.
¿Cómo saber si un cuadro de bicicleta tiene fisuras?
Vamos a tener que revisar centímetro a centímetro el cuadro de la bicicleta. La bicicleta tiene que estar limpia para detectar posibles fisuras. Ya que si la bici tiene trozos de tierra o barro pegados, estos pueden ocultar estas fisuras y llevarnos una sorpresa al lavarlas. El hecho de que la pintura pueda estar descascarillada o rayada por algún golpe de piedra, no significa que esté necesariamente fisurada. Si tienes dudas, consulta con un taller profesional. Pero perfectamente puede ser simplemente pintura levantada y el cuadro estar en perfecto estado.
El consejo final para comprar bicicletas de segunda mano
En lo primero que me fijo al comprar bicicletas de segunda mano no es en la bici, es en la persona. Es fácil detectar si actúa como si estuviera ocultando algo. También es útil ver en qué coche ha venido y el estado en el que está (Si está cuidado o no). Ver el estado de otras bicis que tenga, también nos ayudará a ver cómo suele cuidar las bicis. Porque cuando alguien te quiere vender la bici, la va a “maquear” al máximo para que la veas en el mejor estado posible. Y esto puede que no sea el trato habitual que la bici suele recibir. Por eso me suelo fijar más en la persona que en la bici, porque puedo llegar a imaginarme cómo la trató realmente. También es importante descubrir el nivel y el uso que el piloto le ha dado a la bici. Y el tipo de rutas que suele hacer con la bicicleta que te va a vender. Si ves que es un novato que apenas se mete en sitios complicados… Es posible que la bici no haya sufrido mucho. Por otro lado, si anterior dueño es un Pro, probablemente la bici pueda tener más caña, pero probablemente la ha cuidado mejor, ya que sabe como tratar una bicicleta. Y un novato probablemente no sepa ni cambiar una cadena…
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